EL PODER DE LA PALABRA
Teresa Carreón
La palabra que decimos tiene el poder de cambiar las circunstancias. Con la palabra podemos dar felicidad o herir a alguien. Con las palabras podemos exaltar o difamar, podemos construir o destruir. Esta semana el periodista Jorge Ramos invita a dejar de usar la palabra “ilegal” para referirse a los inmigrantes indocumentados en Estados Unidos, ya que asegura que de las palabras que se elijan para describir alguna situación problemática, depende su resultado.
Los norteamericanos al referirse a los indocumentados como “illegals” o “ilegal aliens”, sugieren con esos términos que se trata de terroristas o criminales. Y no lo son.
Quienes han apostado hasta su vida por ingresar al territorio norteamericano sin documentos están violando alguna ley norteamericana, pero de igual modo lo hacen quienes los contratan para trabajar sin que por ello sean denominados “empresas ilegales” o “ciudadanos ilegales”. Ramos asegura que lograr que los estadounidenses llamen indocumentados a quienes hoy denominan ilegales, ayudaría a crear un clima favorable para la aprobación de una reforma migratoria que legalice la estancia de 11 millones de indocumentados en el vecino país del norte.
Sonia Sotomayor, la nueva jueza de la Corte Suprema de Justicia, prefirió usar el término “inmigrante indocumentado”, en lugar de “ilegal”, en una decisión que tomó el pasado mes de diciembre. Barack Obama y John McCain casi siempre utilizaron el término “indocumentado” durante su campaña presidencial en el 2008.
El presidente del partido Republicano, Michale Steele, usa el término “illegal aliens” para referirse a los indocumentados ya que asegura que “si están aquí ilegalmente hay que llamarlos por lo que son.”
Ramos tiene la esperanza que muy pronto Steele y muchos otros políticos también cambien su vocabulario y se refieran a estos inmigrantes con respeto y hasta agradecimiento, ya que no es ningún secreto que los indocumentados contribuyen mucho más de lo que reciben de la economía estadounidense y que se merecen vivir sin miedo y persecución en un país que cuya jactancia más importante es la igualdad.
Mejor me voy con la música a otra parte con la canción de Lila Downs “La Línea”: Ahí en esa orilla del mundo/No duerme la maquiladora /De un desperdicio en la tierra /El hijo del sol nació /Qué embrullo la curandera /Con trapos y yerbas sobo /La piel de ese niño mulato /Qué pluma su piel brotó /¡Oh qué maravilla es esta! /Lo que el TLC provocó /De una raya imaginaria /De un chivi chivi colo /Que un niño de ojos de luna /Palabra de flor cantó: /“Este mundo material /Solamente es pasajero” /Flor de maíz /El cielo te está cuidando /Llano de lumbre /La tierra que te parió /Espíritu de la tierra /Espíritu del mal /Espíritu de la suerte /Que tiene que caminar…
Comentarios