AGONIZA LA ESCRITURA
Teresa Carreón
El uso de la tecnología que nos pone en contacto con seres del otro lado del globo terráqueo de manera instantánea, ha cambiado drásticamente nuestras costumbres comunicativas. La vieja fórmula de la escritura en papel se ha limitado a las escuelas y su existencia se encuentra en peligro por la realidad digital de las nuevas generaciones. La carta personal gradualmente ha ido desapareciendo para ser sustituida por el mensaje público, intercambiado con otros por medio de dispositivos electrónicos.
El semiólogo y novelista Umberto Eco puso el dedo en la llaga recientemente a raíz de un informe que revelaba que la mitad de los niños italianos tienen problemas para escribir a mano. En su opinión, aunque la pulcritud de la escritura no asegura la brillantez mental, el largo declive de la enseñanza de la caligrafía en las escuelas ha ido minando el aprendizaje de una habilidad psicomotriz que "favorece la coordinación entre mano y ojo".
El acto de escribir y leer es neurológicamente complicado, y no está instalado en nuestros genes de la misma forma que el lenguaje. La escritura exige coordinación motora fina, reconocimiento visual de caracteres y la correlación de estos caracteres con elementos semánticos y auditivos; el proceso incluye varias áreas diferentes del cerebro y cerebelo. De este modo, y dado que el cerebro es plástico y reacciona ante el uso, el aprendizaje de la escritura literalmente nos cambia el modo de pensar y la misma estructura cerebral.
Al escribir en la computadora y en los celulares tecleamos de forma automática y no acostumbramos revisar lo escrito: confiamos demasiado en el corrector automático. La popularidad que actualmente tienen los SMS ("Short Message Service") entre los jóvenes ha puesto de moda las abreviaturas y el empleo exhaustivo de la letra ‘K’. Si el sistema educativo ha dejado vacilante su ortografía, la moda actual de escribir los está confundiendo totalmente.
En Francia existe un gran apego hacia el papel y el lápiz, por ello es frecuente que se pida al candidato a ingresar en una empresa, que presente su currículo escrito a mano, porque consideran que con ello tendrán información sobre el carácter de quien escribe, además de que da pistas sobre su capacidad de presentación y de orden.
Mejor me voy con la música a otra parte con la canción “Carta de Amor” de Juan Luis Guerra: Querida mujer, dos puntos, /no me hagas sufrir, coma, /es la segunda carta que escribo y no recibo nada de ti, /ya no me importa si hay luz en el barrio o aumentará la inflación, /tan sólo vivo por refugiarme desnudo en tu corazón, punto y aparte…
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